11.03.2016

Toda fiesta en el alma se termina
es cuando se le pide a las calaveras no chillar, pero si.
Si, chillen calaveras!
Griten que vivir es morir,
En cada pestanear, se abre el alma poética de las historias
y luego la belleza perece putrefacta.
Aboname la tierra y que espere fértil,
a vaya saber que vuelo nuevo de aventuras.
Si logras perder el vértigo,
esas montañas dan sentido a la sangre fluir sin control.