5.24.2013

Montañas de colores sobre la cama, así de suave se nombra mi desorden en tus labios. Apurada por abrigarme no encuentran mis manos como sostener la frazada, corre tu brazo a abrigarme la espalda, y duermo cómodamente en una cita bíblica que invoca el terreno de Dios, duermo en tu cuello.

5.11.2013

Pasa el viento cual si fuera tiempo, como si el tiempo no fuera eso. Viento. Aire que camina rápido y algunas veces se detiene en tus mejillas, si tenés suerte se va al pelo, te lo estira y vuelve a su lugar. Abraza intensamente el tiempo, algunas veces. En él, resplandecen las miradas, se las lleva si las hermosas vistas que tomamos no las hacemos ser hechos. Así se veía la bailarina pérdida entre las luces y sombras de los bailarines. Que la atajaban, la ayudaban a desplegar sus alas de belleza y se iban, sin decir hola. Solo la invitaban a bailar un rato. Le besaban los oídos, le endulzaban las piernas. Ella sin ser temeraría los abrazaba de todas las formas, con su boca, con sus dedos, con sus pelos, con sus piernas, con sus palabras, sin sus pasos. Qué para el camino están otros.
Puede darle el perímetro que le falta con su boca.Puede resolverle los problemas de su piel con las manos. Puede permanecer sudandole las pestañas como luna envuelta de niebla. Si es de noche y no tiene estrellas que seguir. El latido de ese varón se escucha a lo lejos, como un eco nuevo del viento. Se oscurece la ciudad y pareciera que brilla solo una casa. Los calores de las pasiones, los fuegos de las bocas. la concurrencia de las miradas, y las distracciones. Parece efímero como si en realidad no lo fuera. Parece desnudarse como si no pudiera esconder sus pechos, parecen bien recibidos como si no pudiera esconder las manos que la tocan. Parece un dialogo incierto como si en realidad no fuera así.
El sol reluce como Dios de las tardes.
Círculo de luz que convoca a los fuegos y a sus comienzos.
Percibe el calor del agua.
Las ondas van vienen trayendo a los que la siguen susurros a sus oídos.
No se desprenden de la boca, si no de las manos. 
Se juegan las olas como si fueran las manos de las personas.
No lluevas de mas, no mires la luna. 
Aprovecha este sol que calienta las pieles,
y las olas se encargan como mensajeras de las buenas nuevas.

5.07.2013

Cristales celestes. Detrás de todos ellos, en el fondo de los cuencos sostenedores. Entre ellos, ojos. Celestes, verdes, rayos de luz en sus superficies. Entre ellos, ojos. Inmenso paraíso de descanso y cansancio placentero, se aprovecha bien aquel que se fatiga por una búsqueda  Se desprenden de la cara, chorrean los celestes, entran en las bocas y salen en cataratas, se mezclan percibiéndose. Entre ellos, ojos. Se sabe de los celestes, como de las resistencia en los libros. Se saben, ellos se saben que entre los celestes están los ojos.