5.30.2014

Como buen marinero, cuida las sirenas de sus costas. En algún viaje las visita dándoles historias. Lo que no sabe es escuchar, su oír no tiene disciplina. Ellas contienen las historias de una ciudad, conocen el movimiento y de locales la partida esta ganada de entrada. A la hora de narrar no las ayudan los nuevos paisajes e inventan en las noches un paisaje para contarle al día.