te tengo, estas en mi pecho. sos un calor y un ardor. quemas como nunca ahora lejos. pero no estabas lejos estando cerca? sera la lejanía las causas de las cercanías. y mi resolución de la que nunca entendí tu ausencia. es que te adoro con mi cuerpo y vivir. estando o no, siempre en un llanto me vas a hacer reír, y una risa me encontrara en la nostalgia. no veo tachones, ni trazos nuevos anulando algunos. veo que hay un irse y modificar, y tengo que cambiarme para quererte igual.

nos cambio el tiempo, y cambio lo echo juntos. nos modificamos con acciones y silencios. están sintiendo mis mejillas lagrimas cuando las brisas las soplan. mi pecho busca entenderte y abrazarte siempre. quererte, bajo las lluvias y soles. sera época de tiempo en nuestras manos y algún día nos vamos a abrazar con el mismo calor que nos sabemos dar.

aprendernos y dejarnos estar.
en tus silencios y desganos.
en los míos y nuestros abrazos.
en los cambios de miradas,
nuestros ojos que no entienden sus palabras.
un tiempo después charlan,
otro tiempo se despiden.
entendernos como vida,
relaciones y construcciones.
desaprendernos y dejarnos ser.


los ritmos de la vida,
nos marcan los bailes.
y a nosotros que nos gusta la alegría,
cuando surge una despedida...
cuando alguien te pisa el pie,
y vos lo estas abrazando.
lo miras, duele, pero ahí estas para sobreponerse ambos.
siempre y cuando la intención sea bailar a la par.
hay un tiempo de distancias,
y hay que aceptar los descansos.
de no querer dejar de bailar a uno le pueden salir callos
duelen, te endurecen y no dejan verte la piel, ni a vos ni a tu compañía.
ser perceptivo con los ritmos de la vida.
el tiempo donde no se ve,
hay que dejarlo estar,
esa pareja se cuida dejándola bailar.
tu cadencia pide lo mismo siempre que te hacen disfrutar.
la coreografía, con ese par.
se modifico, tanto que tus pies se entorpecen.
pero entrégate al ritmo, aunque no te guste.
justamente, lo maravilloso de no tener control.
tus pies lo entienden, cuando no pueden dejar de moverse con un ritmo alentador.
deja la pareja, seguí el ritmo de hoy, y tal vez, otra pista, otro tiempo.
surge un nuevo paso inesperado, surge un olvido y un recuerdo.
surge una obra que no sabías su fin.
ritmo de la vida en sus pies, surge para hacerte vivir.

No, si, digo no. Creo que están habitando personajes en tus iris.

 ¡Qué? 

Si , perdón lo imprudente. Vengo de comprar leche en el almacén, acá están las bolsas, y se que estoy caminando hace cinco segundos a tu lado, pero te acabo de ver salir del club de a la vuelta y vi como mirabas. Hasta en tu caminata se notaba. 

Bueno, no entiendo que querés.

Quiero informarte que tenes personajes, que ves y construyen historias. Vos viste como creció el club? yo voy a comprar siempre a ese almacén pero solo veo como crece el club, todos lo días veo un poco mas ameno ese lugar. Vos y tus personajes están haciéndolo crecer. 

Pero, estamos construyéndolo con compañer...

Noooo, perosonajes. Ficción querida. Vos no entendes que eso no es real? esos personajes de tus iris solo construyen este año ese club, como paso acá a 15 cuadras con el otro lugar, o como paso hace dos años en aquel barrio. No es real, nena. Tus personajes y vos, las historias que le ofrecen a la gente... bueno de eso te quería hablar estamos agradecidos, pero son ficticias. 

Yo creía que era un derecho lo nuestro. Aportar en donde vivimos.

No, reina. Lo de ustedes es puro cuento. Una estrella fugaz, porque este castillo es medieval, vos venís con tu 2014 pero esto es el Medio Evo. No te olvides. Todo ese cuento que armaron, tiene que tener un final. Contales a tus iris, que es hora de narrar la despedida. El silencio. El 2014 en un frasquito, el 2015 tendrá la misma suerte que los 24 años anteriores. Esto es la realidad y vos solo tenes en tus iris ficción.

La racha del conurbano, la ficción de los derechos culturales y políticos, la realidad de la opresión.

Nunca me gusto ser exacta en el escribir. Dado mis pocas posibilidades de verbalizar estoy acá, sentada y esperando redactar con coherencia un buen escrito para que el gustador de las palabras comunes, las palabras que desenrrieda desde su pecho el de al lado, lea claramente lo que mi boca quiere decir y que generalmente, pobrecita, se tropieza de emociones y de enrriedos.