De noche mis emociones se ponen al rojo vivo. Justo cuando mis ojos no quieren ver más, mis piernas quieren estirar y mi mente divagar. De noche no me doy cuenta que no puedo hacer y deshacer, es cuando sólo quiero dormir y justo antes de eso un mundo con planos ajenos a éste y con objetos inéditos, se proyecta en mi frente. De noche veo el calor del sol.